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Aquí, al revisar los altibajos de los televisores 3D, discutimos las razones para detener la tecnología 3D, que alguna vez se denominó como la nueva evolución de la industria de la televisión.

A principios de la década de 2010, parecía que los televisores 3D marcarían el comienzo de una revolución en la industria electrónica. Mientras tanto, los principales productores de televisión dieron la bienvenida a esta idea y, junto con ella, los canales de televisión y los DVD que transmiten contenido en 3D también fueron aumentando día a día. Sin embargo, en la segunda mitad de esa década, las cosas cambiaron rápidamente y los televisores 3D se eliminaron silenciosamente casi sin dejar rastro, dando paso a los paneles con resolución 4K y tecnología HDR.

Factores como el mal momento, las restricciones de implementación y los altos costos causaron que los televisores 3D finalmente cayeran a pesar de la amplia publicidad. De hecho, no fue la única tecnología de la época que fracasó rápidamente después de su lanzamiento. La Wii U fue un fracaso más infame, con un marketing confuso y la falta de juegos, lo que la convirtió en la peor consola de Nintendo en la historia. La eliminación de la Wii U y los televisores 3D fue un gran empujón para que los fabricantes se dieran cuenta de que los consumidores no necesariamente van a comprar todas las innovaciones electrónicas, independientemente de la exageración.

En 2016, la mayoría de los principales fabricantes de televisores eliminaron las capacidades 3D de sus nuevos productos y, un año después, casi no había tales televisores en el mercado. Aunque no es improbable que algún día esta tecnología vuelva a evolucionar y regrese en forma de paneles 3D sin gafas, pero actualmente, el proyecto de hacer televisores 3D se ha disuelto por completo, solo una década después de su introducción.

Avatar, el iniciador del proceso de fabricación de televisores 3D
James Cameron
James Cameron, director de la película 3D Avatar

La idea de la televisión 3D no es absolutamente nueva. Uno de los primeros pioneros de la industria de la televisión, llamado John Logie Baird, demostró por primera vez en 1928 la primera forma de televisión en 3D llamada estereoscópica. Pasó años tratando de convencer a los ejecutivos de radiodifusión y los comités gubernamentales para que aceptaran su idea, pero finalmente fracasó. En cambio, los ejecutivos de TV querían enfocarse en mejorar la calidad de la imagen para brindar imágenes más claras a la audiencia, y por esta razón, la propuesta de Loggy Bird no fue aceptada.

Finalmente, en el siglo siguiente, la industria de la transmisión en 3D celebró su primer éxito con el lanzamiento de la película Avatar en 2009, y se formó una gran ola de entusiasmo y recepción en torno a la idea. Avatar eventualmente se convirtió en la película más taquillera de todos los tiempos, y los fabricantes de televisores, viendo su éxito, rápidamente comenzaron a desarrollar televisores con capacidad 3D para ofrecer a los consumidores una experiencia similar, esta vez en casa.

Mientras tanto, LG y Panasonic fueron las primeras empresas en producir sus televisores 3D, y otros fabricantes se les unieron a poca distancia. Además, ESPN y Sky fueron las primeras cadenas de televisión en dar la bienvenida a esta categoría de televisores mediante la transmisión de contenido en 3D. Además, las películas en 3D se lanzaron en forma de discos Blu-ray domésticos para que los espectadores puedan ver todos sus títulos favoritos en casa como una experiencia de cine en 3D.

Éxito inicial y temporal en la venta de televisores 3D
Televisores

Al principio, parecía que todo era una preparación para una recepción especial de los televisores 3D. En 2011, se vendieron 24 millones de televisores con capacidad 3D en todo el mundo y, para 2012, esta cifra había aumentado a más de 41 millones de unidades. Las funciones basadas en la tecnología 3D a menudo se encontraban en los televisores inteligentes de gama alta, que era otra característica creciente de su época. Dado que más consumidores tenían que comprar televisores de gama alta para acceder a la tecnología 3D, esta fue una buena noticia para los fabricantes, ya que aumentó sus márgenes de beneficio.

Pero justo cuando todo parecía estar bien, pronto comenzó el declive de los televisores 3D. Parte del problema con la fabricación de televisores inteligentes 3D era que los fabricantes no sabían si los espectadores estaban comprando los productos para funciones inteligentes o 3D, o una combinación de ambos. Sin embargo, el tiempo ha demostrado que los compradores utilizan las funciones inteligentes de sus televisores más que la tecnología 3D. Por el contrario, el contenido 3D no ha captado tanto la atención de los consumidores como lo adoptaron inicialmente las emisoras y los estudios.

Tiempo de entrega inadecuado
reproductor digital

Uno de los mayores problemas que afectó la adopción de la tecnología de TV 3D fue el momento en que se introdujo en el mercado. En 2009, Estados Unidos pasó de la transmisión analógica a la digital (DTV). Esto significa que los espectadores tuvieron que reemplazar su televisor con un modelo digital o usar sus viejos televisores con el nuevo formato comprando un convertidor de analógico a digital. En un momento en que muchos ya habían gastado dinero en un nuevo televisor o caja convertidora, la mayoría de los consumidores no estaban preparados para pagar una nueva tarifa y volver a los nuevos modelos 3D.

Aunque las ventas de televisores 3D inicialmente se vieron impulsadas por la exageración, las cosas se calmaron rápidamente. En ese momento, los estadounidenses y los consumidores de todo el mundo todavía sufrían los efectos de la recesión de 2008, que causó muchos.

Las familias deben salvar sus activos eliminando sus compras innecesarias. Si bien el cambio al estándar DTV era una necesidad para cualquiera que mirara televisión; Pero no hubo necesidad de reemplazar la televisión con su contraparte 3D, especialmente porque la mayoría del contenido reproducible todavía estaba disponible en 2D.

Falta de contenido 3D
contenido 3D

El siguiente gran problema en el camino de los televisores 3D fue la falta de suficiente contenido 3D para usar esta tecnología. Aunque una serie de canales de suscripción y satélite se establecieron poco después de que los primeros televisores 3D ingresaran al mercado, la mayoría de ellos dejó de operar después de uno o dos años. Por ejemplo, ESPN disolvió su canal 3D en 2013 y Sky y otros competidores abandonaron las transmisiones 3D. A pesar de que los organizadores de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi 2014 se comprometieron a filmar todos los eventos en 3D, en la práctica ese contenido era imposible de ver. Porque las emisoras de televisión se negaron a mostrarlo por falta de interés de la audiencia.

Con la cancelación de canales de televisión y la no transmisión de juegos deportivos en 3D, incluso con los mandatos de las emisoras, el declive de la tecnología ha comenzado claramente. Como resultado, menos espectadores quedaron dispuestos a interactuar con el contenido 3D, ya que ya no atraía al público en general y, como resultado, las emisoras y los estudios se mostraron reacios a producir contenido 3D. De hecho, hasta 2016, el único contenido 3D nuevo lanzado eran películas, con uno o dos servicios de transmisión que ofrecían una cantidad limitada de proyecciones en 3D.

Gafas 3D activas versus pasivas
gafas 3D

Independientemente del programa de contenido y producción, quizás el mayor problema con los televisores 3D era que no eran visibles a simple vista. Para obtener el efecto 3D, los espectadores tenían que usar anteojos especiales, que venían en dos tipos. La primera categoría se llamaba gafas activas, que eran utilizadas principalmente por empresas como Samsung y Sony, y tenían obturadores que se abrían y cerraban rápidamente y alternaban imágenes entre el ojo izquierdo y el derecho, unas 120 veces por segundo.

Otra opción para los espectadores eran las gafas 3D pasivas que usaban filtros de lentes polarizadores simples como los que se ofrecen en los cines. Como esta categoría era más liviana, económica y compatible con diferentes marcas de televisores, fueron utilizados por fabricantes como LG y Vizio. Pero el principal inconveniente de las gafas pasivas era que dividía las imágenes en dos partes, lo que provocaba la creación de una imagen mucho más borrosa, especialmente en televisores con pantallas de grandes dimensiones. Tampoco fueron muy efectivos para reducir la fatiga ocular en comparación con la muestra activa, y este efecto secundario seguía siendo un problema irresoluble para los espectadores 3D.

Costos ocultos
gafas pasivas

Si bien los anteojos pasivos se podían comprar por sumas bajas, las muestras pasivas a menudo costaban más de $100 por par de anteojos y eran muy frágiles y vulnerables. Para una familia normal de cuatro que quería ver una película con algunos amigos, este costo era muy alto y no era más que comprar un televisor. Las gafas activas, por otro lado, tenían una duración de batería relativamente corta, y algunas de ellas duraban solo unas pocas horas, lo que apenas era suficiente para ver una película.

No solo eso, sino que los espectadores que querían una experiencia óptima también tenían que asegurarse de que su reproductor de Blu-ray Disc, su receptor de cable o satélite y sus periféricos fueran compatibles con el formato 3D. A diferencia de muchas innovaciones en la industria de la televisión, como HDR y Smart TV, a las que se puede acceder sin problemas en la sección de configuración, aprovechar al máximo las capacidades de reproducción 3D de un panel requiere un costo y una consideración adicionales.

Problemas de calidad de imagen de los televisores 3D
Ver contenido 3D

Además del uso constante y molesto de las gafas 3D, los espectadores también encontraron una calidad mucho más baja en este tipo de televisión en comparación con sus contrapartes 2D. Por ejemplo, el ángulo de visión de las muestras 3D era limitado y solo era visible cuando se veía el contenido directamente.

La luz de la habitación también se consideró como otro factor problemático, porque las imágenes en 3D son más oscuras que los ejemplos en 2D y los fabricantes de televisores no aumentaron la salida de luz de sus productos en respuesta a la solución de este problema. Esto significa que los televisores 3D a menudo se ven tenues y este problema se puede ver incluso cuando se reproduce contenido 2D.

Incluso suponiendo que se ignoren todos los problemas anteriores, no se puede negar que a algunos espectadores simplemente no les gustaba ver contenido en 3D. Los efectos secundarios como fatiga visual, dolores de cabeza y náuseas eran tan comunes que se aconsejaba a los niños y adolescentes que no vieran contenido 3D en la televisión, lo que hacía que la visualización familiar fuera un desafío poco práctico. No hace falta decir que las personas con ojos vagos tampoco podían ver los efectos 3D y solo se les mostraba una pantalla desenfocada.

Falta de preparación de los minoristas
Empleados minoristas

El último clavo en el ataúd de los televisores 3D fue el intento fallido de los minoristas de convencer a los consumidores de que pagaran los costos adicionales. Después de la exageración inicial, los minoristas a menudo ofrecían televisores 3D sin anteojos ni baterías, según LifeWire. Por lo tanto, algunos se venden.

Sin saber cómo funcionan estos dispositivos, Gunn tuvo problemas para configurar los televisores al salir de la tienda.

Además, una idea errónea común era que los televisores 3D no podían reproducir contenido 2D y el personal de la tienda no hacía lo suficiente para disipar esta idea errónea. Por lo tanto, muchos clientes pospusieron su compra como resultado de tal rumor. Con respecto a cierta tecnología como 3D, los clientes necesitaban comprender su verdadero atractivo en la práctica, pero la mayoría de las veces no era posible utilizarlos y probarlos en las tiendas.

Como resultado, los compradores potenciales elegirían un televisor que pudieran comprender mejor los beneficios de usarlo. Al igual que los canales de televisión 3D, dado que había menos interés en este formato, los minoristas tampoco dedicaban mucho tiempo a capacitar a sus empleados para demostrar las capacidades 3D y este círculo vicioso finalmente llevó a la apatía y la decepción de los clientes.

La muerte de los televisores 3D
Control de televisión

Con la disminución de las ventas, la cancelación de los canales de transmisión 3D y los comentarios de los clientes poco positivos, los fabricantes de televisores perdieron rápidamente el interés en la tecnología. Llegaron a la conclusión de que sin la aceptación popular y el uso de contenido 3D, no valía la pena desarrollar la función, por lo que los televisores 3D se eliminaron silenciosamente del inventario de la tienda. A partir de 2017, todos los principales fabricantes de televisores abandonaron el uso de la función 3D, como dijo el gerente de desarrollo de productos de LG:

Esta tecnología no es un factor de compra clave a la hora de elegir un nuevo televisor, y la información obtenida indica que el uso de la tecnología 3D no es bien recibido por los clientes.

En cambio, LG ahora se enfoca en comercializar 4K y HDR, que tiene un atractivo mucho más global.

Con los grandes actores de la industria de la televisión abandonando la tecnología 3D y el contenido de transmisión en 3D quedando obsoleto, parece que el formato desaparecerá para siempre. Aunque todavía se estrena una pequeña cantidad de películas en 3D, la mayoría son películas en 2D que se convierten en 3D después del proceso de producción. Según Lifewire, la mayoría de estas versiones están disponibles en grabación Blu-ray, así como la versión 2D de cada película como estándar.

Sin embargo, ver películas en 3D requiere un televisor compatible fabricado antes de 2017. Dado que la mayoría de los espectadores han actualizado sus dispositivos desde entonces, este formato solo está disponible para unos pocos.

¿Es posible revivir la tecnología 3D en los futuros televisores inteligentes?
gafas 3d

Si bien la probabilidad de que esta tecnología regrese a corto plazo es muy baja, todavía existe la posibilidad de que la tecnología 3D pueda regresar a los televisores en el futuro. Justo antes del punto final, LG presentó una pantalla 4K con capacidades 3D pasivas que ofrecía una imagen mucho más nítida que la generación anterior de pantallas Full HD. Esta tecnología se puede agregar fácilmente a la generación actual de televisores 4K en cualquier momento, sin necesidad de costosos anteojos activos.

Sin embargo, la razón principal del deseo de la audiencia de ver 3D fue la película Avatar. James Cameron, como su creador, siempre ha hecho hincapié en que esta tecnología no está muerta y simplemente se acepta. La secuela de esta película, que lleva por nombre "Avatar: The Way of Water", se estrenará en cines el 16 de diciembre de 2022 en 3D y 2D. Queda por ver si el regreso de la serie revivirá y fortalecerá la demanda de una nueva generación de tecnología 3D.

Sin embargo, dado que muchos de los problemas del formato aún no se han resuelto satisfactoriamente, esta posibilidad parece poco probable, al menos a corto plazo. Actualmente, los televisores 3D son una idea innovadora pero defectuosa que no ha cumplido su promesa de revolucionar el mundo de la televisión.

diseñador 3d

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